La idea era, después de disfrutar del cine de Méliès, imitar mediante una producción de no más de un minuto el accidente que abrió a Méliès las puertas de la magia: el escamoteo. En la red hay muchos ejemplos de lo que llamamos el efecto Méliès y que está en la base de formas de animación completamente vigentes hoy en día como la técnica "stop motion". Mostramos uno de los ejemplos del efecto Méliès. En próximas entregas nuestra aportación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario